Cuando me pongo a escribir un post y observo el perfil que va tomando, me paro a pensar si eso era lo que yo quería expresar en esta "Casa del Pueblo Virtual".
Este Blog está sufriendo un cambio, igual que mi vida.
Esta noche, después de haber llegado a Madrid, llevar un rato en la habitación del Hotel, me apetece contaros algo.
Parece ser que los políticos/as tenemos que parecer personas frías y lejanas, y me niego a eso.
El otro día una compañera que en esta Legislatura ha sido elegida para representarnos en el Congreso de los Diputados, me contaba que cuando entró por primera vez al Congreso lo quiso hacer sola, para disfrutar de ese momento, de ese grandioso momento.
Yo comienzo una etapa después de experiencias en mi vida que me han marcado, una etapa apasionante, un reto en el que tengo que trabajar muy duro (y le tengo respeto pero no me asusta).
Esta noche cuando iba montada en el taxi de camino para el Hotel, viendo Madrid, me sorprendia de mí misma: tenía una sonrisa en la cara, estaba viviendo un momento único, íntimo, personal y maravilloso, mi llegada a Madrid para trabajar por los demás en una Institución Democratica, un sueño para una persona que entró en política para mejorar la vida de los demás (y, por supuesto, para eso no había otro Partido mejor que el PSOE.)
Debo dormir, mañana tenemos un día duro, pero quiero disfrutar de este momento, de esta noche ...
Este Blog está sufriendo un cambio, igual que mi vida.
Esta noche, después de haber llegado a Madrid, llevar un rato en la habitación del Hotel, me apetece contaros algo.
Parece ser que los políticos/as tenemos que parecer personas frías y lejanas, y me niego a eso.
El otro día una compañera que en esta Legislatura ha sido elegida para representarnos en el Congreso de los Diputados, me contaba que cuando entró por primera vez al Congreso lo quiso hacer sola, para disfrutar de ese momento, de ese grandioso momento.
Yo comienzo una etapa después de experiencias en mi vida que me han marcado, una etapa apasionante, un reto en el que tengo que trabajar muy duro (y le tengo respeto pero no me asusta).
Esta noche cuando iba montada en el taxi de camino para el Hotel, viendo Madrid, me sorprendia de mí misma: tenía una sonrisa en la cara, estaba viviendo un momento único, íntimo, personal y maravilloso, mi llegada a Madrid para trabajar por los demás en una Institución Democratica, un sueño para una persona que entró en política para mejorar la vida de los demás (y, por supuesto, para eso no había otro Partido mejor que el PSOE.)
Debo dormir, mañana tenemos un día duro, pero quiero disfrutar de este momento, de esta noche ...
Yo me bajo en Atocha (Joaquín Sabina)
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